Jesús dijo: “Yo soy la verdad…”
Esta expresión de Jesús es mucho más profunda de lo que
pensamos significa que él es real,
cierto, lo que se espera que es, auténtico, exacto, que lo que se dice se
adecua a lo que se ve.; pero en este estudio tomaremos la verdad en
relación a la forma de hablar, hablar lo verdadero.
Un verdadero discípulo de Jesús dice la verdad. Anda en la verdad y hace lo que es verdad.
Hoy en día un hombre o una mujer que hablen la verdad en
todo tiempo, que siempre vayan con la verdad por delante hay pocos, es una
especie en vias de extinción, pero gracias al Espíritu Santo podemos recuperar
a este tipo de personas que se avergüenzan grandemente cuando mienten y que lloran cuando no cumplen
lo que prometen o no pueden llegar a tiempo a una cita.
“Hombre de verdad ¿Quién lo hallará?”
¿QUIERES SER TÚ ESE HOMBRE O MUJER?
Para analizar bien lo que es verdad vamos a estudiar lo que
no es verdad: LA MENTIRA Y LA FALSEDAD
LA FALSEDAD Y LA MENTIRA:
La mentira es uno de los pecados más generalizados en nuestra
sociedad, al punto que la conciencia de muchos cristianos se ha insensibilizado
y debilitado con respecto a este mal.
Hay muchos que
creen que “no se puede vivir sin mentir”. Por lo general, el hombre se
justifica al hacerlo, pero sus justificaciones son ilusorias y sin fundamento,
pues la falsedad y la mentira son inmorales y contrarias a la conducta que Dios
requiere de los hombres.
¿QUE ES LA
MENTIRA?
La mentira es la afirmación o negación de una cosa
contraria o diferente a la realidad.
Su esencia es el engaño al prójimo, su gravedad depende
del grado de egoísmo o maldad que la engendra.
Es una manifestación de la naturaleza caída del hombre.
Puede ser una expresión espontánea, como un “recurso fácil” del momento, o un
engaño maquinado o premeditado. Es decir, puede ser generada por una actitud
descuidada y fantasiosa en nuestro modo de pensar y de hablar, o por un engaño
deliberado. El mentir se convierte fácilmente en un hábito al punto de volver
casi insensible la conciencia del mentiroso.
Es uno de los pecados que se manifiestan desde los
primeros años de la vida.
Debemos acostumbrarnos a decir siempre e intencionalmente
la verdad, y acostumbrar a nuestros hijos a ser veraces desde pequeños. Dios
condena este mal tan común en la sociedad al declarar en uno de los diez mandamientos:
“No hablaréis contra
tu prójimo falso testimonio” Exo. 20:16.
Uno de los testimonios más evidentes de nuestra conversión
a Cristo es el dejar de mentir:
“Por lo cual,
desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo;
porque somos
miembros los unos de los otros.” Efe. 4:25.
La falsedad y el engaño son muy perjudiciales en la
relación entre los discípulos de Cristo. Fomenta la desconfianza, el recelo, la
duda, la incredulidad, la sospecha. Destruye la comunión y el ambiente de fe,
de amor y de unidad. Además, es un pésimo testimonio ante el mundo.
CASOS Y CAUSAS
DE ENGAÑO Y MENTIRA:
En las Sagradas Escrituras encontramos ejemplos de engaño:
1)
Satanás engaña a Eva por maldad para destruirla: Gen.
3:4.
2)
Caín miente a Dios, diciendo ignorar el paradero de su
hermano para ocultar su pecado: Gén. 4:9.
3)
Abraham presenta a su esposa como su hermana por temor
a que lo maten: Gén. 12:11-20.
4)
4)Jacob engaña a su padre para
quedarse con la bendición: Gén. 27.
5)
Los hermanos de José engañan a su padre para ocultar su
maldad hacia su hermano: Gén. 37:32-33.
6)
Herodes engaña a los magos para matar a Jesús. Mat. 2:
1-12.
7)
Los judíos acusan falsamente a Jesús por celos y odio:
Mat. 26: 59-61- Luc. 23:2.
8)
Ananías y Safira mienten a Pedro a la iglesia y a Dios
para mostrar una mayor consagración: Hechos 5
También, se
suele mentir por las siguientes razones:
1)
Para obtener injustas ventajas económicas, ganancias
deshonestas o para robar,
2)
para evitar el sufrimiento, para exaltarse a uno mismo,
para evitar un justo castigo o disciplina, para avaricia o amor al dinero,
3)
para denigrar a otros por celo o envidia,
4)
para aparentar ser mejor de lo que se es, etc.
DIOS PROHIBE Y
CONDENA LA MENTIRA
Consideremos lo que
enseña la Palabra al respecto:
§
No debemos engañar, mentir, ni jurar falsamente:
Lev. 19:11-12.
§
Dios destruirá al mentiroso: Sal. 5:6.
§
Dios aborrece la mentira: Prov. 6: 16-19- Prov.
12:22.
§
Pesas y medidas falsas son abominación al Señor:
Prov. 20:10.
§
Las mentiras corrompen al hombre: Mat. 15:
18-20- Mat. 7:21-23.
§
La mentira está engendrada por el mismo diablo:
Juan 8:44.
§
El engaño es otro aspecto de la profunda
degradación del hombre: Prov. 26:24-28. Sal. 58:3. Jer. 9:3-5- Rom. 1:28-32
§
Es una manifestación del viejo hombre que
debemos desechar: Col.3:9-Efe.4:22- 25- 1 Ped.2:1.
§
El engaño hace la vida infeliz, pero Dios
promete bendición y días buenos a los veraces: 1 Ped. 3:10.
§
Jesús aborrece y condena la hipocresía: Mat.
15:6-8-23:27-28.
§
Los apóstoles amonestan contra el fingimiento:
Rom.12:9- 1 Ped.1:22.
§
Los mentirosos no entraran a la nueva Jerusalén,
sino tendrán su parte en el lago de fuego: Apoc.21:7-8-27- 22:14-15.
DEBEMOS HABLAR
SIEMPRE LA VERDAD:
Poder comunicar la verdad constituye la gloria y la virtud
esencial de la palabra hablada. El que dice la verdad se vuelve digno de
respeto. Para hablar la verdad, es necesario pensar la verdad, y no guiarnos
por prejuicios, intereses personales, ilusiones o fantasías.
Cristo es nuestro ejemplo de veracidad:
“No hubo engaño en su boca” Isaías 53:9- 1
Ped. 2:22.
Vino al mundo para dar testimonio a la verdad: Juan 18:37.
Estamos en “el verdadero”: 1 Juan 5:20.
Cristo nos ordena a ser absolutamente veraces:
“Vuestro si sea sí y
vuestro no sea no” Mat. 5:37.
Está preparando para sí una Iglesia sin mancha ni arruga:
Efe. 5:27.
Como los discípulos suyos y parte de su cuerpo debemos ser
absolutamente veraces, francos, sinceros, honestos, honrados; aun cuando
tengamos que sufrir por hacer su voluntad: 1 Ped. 4:15-19- Prov. 19:22.
El pueblo de Dios:
§
...Aborrece la mentira y la falsedad: Sal. 119:104-128-163;
Prov. 13:5.
§
...ora para ser guardado de la mentira: Sal.
119:29. Prov. 30:8.
§
...rechaza a los que la practican: Sal. 40:4-
101:7- 144:11- Efe. 5:11.
¿COMO LIBERARSE DE LA FALSEDAD Y LA MENTIRA?
1.
Arrepentirse incluye: cambiar la actitud, la mentalidad
con respecto a la mentira
1.y la falsedad.
2.
Rechazar y desechar la mentira, desterrarla de la
practica diaria.
3.
Determinar obedecer a Dios en todo y vivir siempre en
la verdad.
4.
Disciplinarse hasta cultivar una nueva actitud basada
en la veracidad...
5.
Confesar el pecado: (Prov. 28:13-14. 1 Juan 1:9; 2:1)
hay que confesar la verdad a Dios y a las personas engañadas (si las hubiere).
Cuando la mentira constituye un hábito arraigado en la manera de vivir, debe
ser confesado a un hermano maduro y responsable, buscando una amplia
reorientación (Sant. 5:16). No se puede edificar una vida de veracidad sobre
mentiras y engaños del pasado.
6.
Exhortarse unos a otros: Sant. 5:19-20- Gal. 6:12; Efe.
4:25.. Como la mentira suele afectar las relaciones entre los hermanos, somos
responsables los unos por los otros para corregir, amonestar, enseñar, etc:
CONCLUSION:
Cristo nos ordena ser absolutamente veraces y desechar la
mentira en todas sus formas.
Toda mentira debe ser confesada, aclarando la verdad a las
personas afectadas.
El destino de los mentirosos no arrepentidos es el
infierno.
PARA PENSAR Y
CONVERSAR:
1)
¿Cuáles son las distintas formas en que se manifiestan
la falsedad y la mentira?
2)
¿Qué enseña la Biblia sobre la actitud de Dios hacia la
mentira?
3)
¿Por qué debemos hablar siempre la verdad?
4)
¿De qué manera podemos librarnos de la falsedad y la
mentira?
5)
¿Qué quiso decir Jesús cuando expresó:“Yo soy la
verdad…”
6)
¿Se puede decir una mentirillilla para ayudar a
alguien?
7)
Busca en la Biblia este texto “hombre de verdad quien
lo hallará”
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