HAMBRE Y SED DE JUSTICIA

"Bienaventurados los que tienen hambre  y sed de justicia porque ellos serán saciados..."

El hambre y la sed son sensaciones que tienen mucha fuerza de empuje, una persona con hambre es capaz de hacer cualquier cosa para satisfacer esa necesidad.
Para disfrutar de las promesas que Dios nos ha dado es necesario anhelar vivir cerca de Dios, y buscarlo como uno que busca el aire cuando se está casi ahogando bajo el agua, con esa desesperacion debemos buscar a Dios y las cosas que pertenecen a Su Reino.

Pero no solo es necesario ese ansia por descubrir los secretos de la vida espiritual, sino que tambien tenemos que tener hambre de justicia, de que lo que decimos y hacemos sea lo más justo posible, denunciar las injusticias y hacer sendas derechas para nuestros pies.

El camino del justo es hacia arriba para aparterse del Seol abajo. Si queremos ser justos debemos seguir este camino que no es facil es cuesta arriba, pero cada vez que elegimnos el camino de la justicia, aunque no sea popular, nos acercamos cada vez más a Dios.

La definición de la justicia es: dar a cada uno lo que se merece. Al que honra honra al que respeto, respeto, al que no se merece nada, nada. Y al que hace el mal, castigo.

Cuando tenemos hambre y sed de justicia, eso nos llevará a actuar con más imparcialidad y sensatez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario