¿DIOS ESTA AL CONTROL?

Estos últimos años estanos viviendo la peor pandemia que se conoce en el mundo contemporáneo, porque no es un contagio puntual de unos meses como la gripe común, sino que está formada por olas que crecen y disminuyen una y otra vez, pero que nunca desaparecen del todo. Y es global, otras pandemia han afectado  a unos cuantos países o continentes, pero esta está afectando a todo el planeta. Y aunque hemos sido capaces de crear un antídoto en pocos meses (lo que normalmente lleva años), no parece que todavía sea la solución. El virus no para de mutar y eso complica aun más a las farmacéuticas. Muchas personas están siendo afectadas en su alma por esta situación y otras en sus cuerpos pero ...¿Donde está Dios en todo esto?

¿Qué nos puede estar mostrando papa Dios en este momento de la historia de la humanidad?

1-que el ser humano no puede controlar todas las cosas

no somos perfectos y hay situaciones que se nos escapan de las manos. Y esto por si solo sería motivo más que suficiente para que volvamos nuestros ojos hacia arriba y nos demos cuenta de que hay un ser superior que tiene el control de todo y sabe todas las cosas y tiene las respuestas para todo. Nosotros los creyentes nos vemos abocados a postrarnos ante El  y con toda humildad, reconociendo nuestra incapacidad, pedir sabiduría y gracia a Dios que es el único que nos puede hacer entender qué está pasando.


2-Que lo que pensamos y hacemos trae consecuencias.  

La forma salvaje que tenemos de tratar los recursos de la naturaleza, extrayendo recursos naturales a veces sin ningún control medioambiental, por la avaricia de muchos, dejando residuos por todos lados, acabando con miles de especies de plantas y animales cada año, contaminando los ríos, los mares ,la tierra y el aire con esos mismos residuos. Así no nos extrañe que el planeta se esté calentando lentamente a causa del llamado efecto invernadero, y que en un futuro no muy lejano el clima de la Tierra empiece a comportarse de forma inestable.

Incluso la forma de pensar de las personas puede afectar primero a sus propios cuerpos, luego a los que le rodean y por fin a la humanidad. Parece increíble pero es como el efecto mariposa del que se ha hablado muchas veces. lo que piensa una persona (y luego hace) en un lugar remoto del planeta, puede afectar a miles de millones de seres humanos. Por ejemplo, aquel hombre o mujer que pensó, decidió comer y comió carne de murciélago o de cualquier otro animal contaminado por el virus, produjo un efecto dominó que acabó con la salud y la estabilidad económica de mies de países a lo largo del mundo. ¡Que barbaridad! eso nos tiene que hacer pensar más antes de tomar decisiones que afecten a otros.

Cuantos, por sus palabras, por ejemplo, han hecho tanto daño a otros, la mayoría de los asesinos en serie han tenido una infancia difícil, donde han escuchado palabras hirientes que han determinado su forma de pensar. (consecuencias que afectaron a la humanidad)

Otros caudillos que con su forma de pensar y sus palabras han inflamado a muchos con el odio hacia un pueblo o una cultura o un género o una religión. Por ejemplo la ideología nazi, que afectó al mundo entero provocando una guerra mundial con millones de muertos y heridos, y aun hoy sigue afectando, a tantas personas en todo el mundo. 

3-Que Dios está al control.

En fin, todo esto nos tiene que hacer recapacitar que tenemos, como ser humano, una responsabilidad ante la humanidad y ante Dios, de mantener una sana manera de pensar y de actuar, de darnos cuenta de que aunque Dios está al control de todas las cosas,  si permite ciertas catástrofes es porque ha hecho al hombre libre y no lo puede llevar por donde quiere sin su consentimiento, pero a los que deciden obedecerle, a los que creen en El, aunque no los librará de todos los males, por lo menos les dará la tranquilidad y La Paz de saber que estará con ellos en medio de la prueba y que les ha preparado un lugar hermoso donde siempre habrá salud, no habrá lágrimas ni dolor y ese estado de bienestar durará por siempre jamás. 

1ªTesalonicenses 4.17



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