La noche oscura del alma.   



“Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría.” Salmo 30.8

¿Cuantos de nosotros hemos pasado una época mala, cuando lo vemos todo oscuro, ese túnel de la vida que cruzamos alguna vez?

Yo recuerdo una vez que tuve un accidente y el golpe produjo en mi pierna un hematoma con un aspecto bastante feo, esa fue una de las noches más oscuras que he pasado, dado que había tenido un desgarro muscular, evidentemente había habido una hemorragia interna, pero yo, durante las largas horas de aquella noche pensé que me había afectado la femoral y que me estaba desangrando internamente, incluso pensé que iba a morir. Todo era producto de mi imaginación, pero tuve que orar y entregarle mi vida a Dios y aceptar "su voluntad” después de esa noche en vela y con dolores llegó la mañana y otro día y otro y otro, que trajeron consuelo y gratitud a mi vida.

Hay esperanza para el justo. En este mundo tendremos muchos días buenos, pero, de vez en cuando, también vendrá "la noche oscura del alma” de la que hablaba San Juan de la cruz. Y aquí es donde no tenemos más remedio que clamar a Dios y esperar la mañana con esperanza. Sabiendo esto: que esta breve prueba produce en nosotros un impacto que afecta la eternidad. Que si soportamos la prueba El nos dará un regalo que nos ha prometido.

Enfrentemos con gozo este dia, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe. Hebreos 12.2.

No hay comentarios:

Publicar un comentario